Zona se ha convertido en ‘corredor de la muerte’ para indocumentados
El Diario del Paso
Para prevenir muertes e ingresos ilegales de migrantes a lo largo de la frontera Sur de los Estados Unidos, Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) desplegará en breve un dirigible de vigilancia de alta tecnología, que forma parte del Sistema de Radar Aerostático (TARS), en las inmediaciones del puerto de entrada de Santa Teresa (Nuevo México), informó el congresista federal por el estado de Nuevo México, Gabe Vásquez.
Y es que en los últimos años este pasadizo fronterizo se ha convertido en un ‘corredor de la muerte’ que ha cobrado la vida de cientos de extranjeros. En lo que va del presente año fiscal, que inició en octubre del 2024, poco menos de 150 personas de diversas nacionalidades han muerto en el desierto.
“Esta tecnología no sólo está destinada a detener a las personas que cruzan la frontera ilegalmente sino también está destinada a salvar vidas”, dijo Vásquez, al resaltar la efectividad de la tecnología, incluido el dirigible que debería estar en funcionamiento a más tardar en un mes en la estación de la Patrulla Fronteriza de Santa Teresa.
Durante un recorrido realizado por el puerto en mención, Vásquez y el senador estadounidense Martin Heinrich, ambos demócratas por Nuevo México, vieron cómo se utilizan los recursos federales en la adquisición del vehículo aéreo que se desplegará por el aire, de no haber contratiempos, en el mes de septiembre.
Se dijo que con esta estrategia el Gobierno estadounidense extenderá sus ojos en el cielo en esta región del estado vecino de Nuevo México a más de 10 mil pies de altura para detectar el flujo ilegal.
Y es que para burlar los radares terrestres, los traficantes de drogas en aeronaves que vuelan a baja altura pueden esconderse detrás de accidentes geográficos, como montañas y valles. Sin embargo, el radar instalado en un aerostato detecta todas las aeronaves que se encuentran dentro del alcance, incluidas las avionetas que vuelan a baja altura y lentamente sobre la frontera.
Desde hace varios años el Gobierno federal mantiene vigilada sus fronteras. Al menos ocho dirigibles especiales que forman parte del Sistema de Radar de Aerostatos Atados, vigilan la frontera Sur de los Estados Unidos.
Se explicó que cada globo está amarrado al suelo con un cable especial de fibra de naylon y se eleva y desciende con un cabrestante motorizado.
Los aerostatos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos se balancean silenciosamente con la brisa, no están tripulados ni armados y pasan su vida útil flotando sobre una ubicación fija en el borde Sur de la frontera.
BSS incluye tecnologías disponibles comercialmente, como sistemas de videovigilancia fijos y móviles, telémetros, dispositivos de imágenes térmicas, radares, sensores terrestres y sensores de radiofrecuencia.
En la actualidad la Patrulla Fronteriza está usando una variedad de equipo tecnológico que van desde drones, torres de control, sensores y hasta equipo que el Departamento de Defensa trajo de vuelta de Afganistán, donde era usado para seguir el rastro de los talibanes.
Asimismo el DHS utiliza más de 12 mil sensores a lo largo de la frontera, cientos de lectores de placas de registro vehicular en los puntos de cruce, y proyectores de rayos X para inspeccionar trenes y camiones.
La corporación tiene previsto incorporar también drones pequeños con capacidad de reconocimiento facial, además de aparatos para capturar información biométrica.
Mediante el uso de estos recursos tecnológicos, afirman las autoridades, ha sido posible arrestar a decenas de miles de personas, que sigue siendo el principal punto de entrada del contrabando de droga y cruce de migrantes indocumentados a lo largo de la frontera Sur.
Paralelamente ha implementado campañas disuasivas y concientización para inhibir el cruce ilegal por los peligros que esto representa para los que se arriesgan en esta peligrosa aventura en su anhelo por alcanzar el ‘sueño americano’.
Los oficiales de CBP “ahora pueden escanear muchos de los vehículos que pasan, pero no al 100 por ciento”, dijo Heinrich al tiempo que se pronunció por expandir el escaneo. “Necesitamos asegurarnos de que tenemos el personal para respaldarlo para que estén escaneando el mayor porcentaje posible de vehículos”.
En cuanto a la operación del dirigible que vigilará desde las alturas expresó que será una buena estrategia para reducir los cruces ilegales y sobre todo evitar que mueran más personas. “Esa es una de las razones por las que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos está a punto de desplegar un dirigible de vigilancia de alta tecnología”.
Elevar el radar y otros sensores a gran altitud aumenta el alcance de vigilancia, y la visibilidad física de un aerostato es un elemento disuasorio visual para la actividad ilegal en el aire y en tierra, explican funcionarios de la agencia de Aduanas y Seguridad Fronteriza. Cada globo TARS contiene un radar que pesa alrededor de 2,200 libras, capaz de detectar aeronaves a una distancia de 200 millas.
En 1978, la Fuerza Aérea de los Estados Unidos instaló el primer sitio TARS en Cudjoe Key, Florida. Un segundo TARS entró en servicio en 1983 en Fort Huachuca, Arizona.
De 1988 a 1991, el Servicio de Aduanas de los Estados Unidos estableció más sitios TARS en Yuma, Arizona, y tres sitios en Texas, incluidos Marfa, Eagle Pass y Rio Grande City. A fines de 1994, otros globos TARS flotaban en Florida, Texas, Puerto Rico e incluso las Bahamas.
La Fuerza Aérea de los Estados Unidos administró el programa TARS hasta julio de 2013, cuando el programa fue transferido a CBP. De esta manera los ojos en el cielo se extendieron sobre la frontera Sur de los Estados Unidos.