Ojinaga Chih.- En el primer sermón que Pedro predico su énfasis era la salvación que solo se encuentra en Jesús de Nazaret. El Apóstol Pedro describe a Jesús como aquel varón aprobado por el Padre. La palabra aprobado se refiere a alguien que ha superado la prueba, dado por bueno o suficiente, es declarado hábil o competente.
Mientras tanto el pastor Joel Moreno Ponce, en su sermón dominical ayer desgloso algunos puntos por demás interesantes desde el pulpito de la 1ra Iglesia Bautista “El Calvario”
A manera de introducción dijo; Todo siervo de Cristo debe tener muy claro en su corazón la idea de ser como su Señor. Ser como Cristo es parte de la vida cristiana.
1.- Jesús fue un varón Aprobado por Dios
2.- Jesús es nuestro ejemplo de vida
3.- Jesús demostró con ejemplo de vida ser aprobado
4.- somos aprobados o reprobados
Conclusión. Dejemos obrar a Dios en nuestras vidas para poder presentarnos como aprobados por nuestro ejemplo de vida
Jesús tenía la aprobación principal, ¡la aprobación y la autoridad del Padre! En Hechos 10:38 nos dice, “cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
Esta aprobación del Padre venía con el sello de grandes maravillas, milagros y señales en el ministerio de Jesús. Era muy evidente que Jesús era el Mesías, el único en el cual se podría obtener la salvación eterna. La aprobación de Dios era evidente, ¡nadie podía negar esta verdad! Aun aquellos que dudaban que el venia del Padre, las obras de Jesús le acreditaban. En Juan 14:10–11, “¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras. Creedme que yo soy en el Padre, y el Padre en mí; de otra manera, creedme por las mismas obras.”
Las obras de Jesús eran innumerables, muchas ni aun están escritas como lo declara Juan 20:30–31, “Hizo además Jesús muchas otras señales en presencia de sus discípulos, las cuales no están escritas en este libro. Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.” Hoy el sigue haciendo grandes milagros entre nosotros, ¡nosotros tenemos a un Cristo de poder que transforma vidas! La respuesta para este mundo es muy sencilla, su nombre es ¡Jesús el sanador, libertador y hacedor de milagros! Sin duda para el no hay nada imposible, Jesús es el varón aprobado por Dios.
