La gimnasta más condecorada de los últimos tiempos aseguró que no está segura de que es lo que viene para ella tras posponerse los Juegos Olímpicos para el próximo año.
Hay un gran calendario en la pared dentro del colosal gimnasio del que es dueña la familia de Simone Biles. Colocado en un pizarrón blanco, el calendario describe cada gran evento del año, incluidos los Juegos Olímpicos de 2020.
Pero los Juegos de Tokio fueron oficialmente pospuestos al verano del 2021 debido a la pandemia de COVID-19. Cuando ello ocurrió, una de las entrenadoras de la reinante campeona olímpica corrió al calendario y borró todo.
Tras observar la forma en que Cecile Landi eliminó el meticuloso plan de Biles, la gimnasta de 23 años quedó temblorosa.
Mientras que muchos atletas famosos hablaron inmediatamente después de que pospusieron los Juegos, Biles necesitó de un tiempo para recuperarse y determinar qué va a hacer.
“Es una decepción”, le dijo Biles a The Associated Press en una entrevista telefónica el miércoles. “Es difícil seguir viéndolo y decir, ‘tenemos un año más’”.
Probablemente. A la pregunta de si en definitiva seguirá con sus planes de estar en Tokio a pesar de la demora, no quiso dar un sí definitivo.
“Nada está fijado”, comentó Biles. “Buscamos el régimen correcto de entrenamiento, para ver si mental y físicamente podemos mantenernos en la mejor posición. Estamos haciéndolo de oído y escuchando a mi cuerpo”.
Si la gimnasta más ganadora de todos los tiempos hablara con total honestidad, diría que estaba entusiasmada por un descanso a mediados de agosto. Ha tenido una especie de cuenta regresiva en su mente desde que regresó a competir en el 2018.
Tener que programar un nuevo inicio no es fácil.
“Estaba mentalmente en una pelea, estaba lista y mentalmente en el momento, pero lista para dejarlo en tres meses”, dijo Biles. “Es mucho para enfrentar mentalmente”.
Para aquellos que dicen, “es simplemente un año más”, Biles tiene una respuesta: Ha pasado la mayor parte de su vida en el gimnasio desde que estaba en la escuela primaria. La luz al final de túnel era cada vez más brillante. Ahora no lo es.
Un año es mucho para atletas de alto rendimiento”, dijo. “El cuerpo lo siente como más de un año, créeme. Especialmente en gimnasia, el impacto que tiene. Es en todo tu cuerpo, no sólo son las piernas, pies o brazos, tenemos que asegurarnos que todo el cuerpo esté bien”.
Es mucho para soportar. Demasiado.
“Siento que hay una presión”, aseguró Biles. “Este año lo estaba haciendo simplemente por mí, sin expectativas. Ahora todas las miradas están encima otra vez, preguntándose. ‘¿Lo podrá hacer ahora que tendrá un año más?’”.