Ojinaga Chih.- La pandemia del coronavirus no sólo está arrojando balances funestos y cimbrando la economía de muchos países, sino que también puede afectar la salud mental de las personas que tienen dificultades para gestionar la cuarentena.
La mayoría de los adultos cuentan con mecanismos de respuesta para hacer frente a situaciones adversas y contrarrestar sus efectos; sin embargo, para una parte de la ciudadanía el confinamiento se convierte en una experiencia potencialmente traumática, que en varias ocasiones llega a alterar su equilibrio sicológico.
La revista de biomedicina The Lancet resalta en uno de sus artículos que esta condición se deteriora debido al distanciamiento social y presenta manifestaciones como síntomas de estrés postraumático, confusión e irritabilidad.
El Centro Sicológico de Madrid, España, señala que la ansiedad, el miedo y la apatía se perfilan también como posibles protagonistas del aislamiento a causa de la incertidumbre que el estado de alarma genera. Estas emociones pueden provocar pensamientos catastrofistas y anticipatorios, situando a quien las padece en los peores y más improbables escenarios.