Ciudad de México.- Paulina Rubio se volvió a encontrar con sus dos exparejas, Nicolás Vallejo Najera ‘Colate’ y Gerardo Bazúa, durante una audiencia virtual realizada por la corte familiar de Miami.
‘Colate’ interpuso una demanda contra la cantante para solicitar la custodia total de su hijo Andrea Nicolás, pero la querella de hoy pedía una solicitud de evaluación psicológica para la ‘chica dorada‘, misma que era apoyada por Bazúa.
Durante la audiencia se dio la presencia de diversos testigos, según se informó en el programa ‘Ventaneando’, pero el que más sorprendió fue el testigo de Gerardo Bazúa, quien relató que fue testigo de diversos episodios de violencia por parte de Paulina Rubio en las que los dos menores estaban presentes.
“Un día me tocó estar comiendo en Ocean Drive aquí en Miami y ella se levantó de la mesa y me empezó a corretear por las calles para golpearme, yo me fui, huí del lugar y ella me persiguió para golpearme. Aproximadamente fue en el año 2017, entre primavera y verano”, dijo.
Detalló que los niños presenciaron aproximadamente tres o cuatro episodios de agresión, pero que en ningún momento ha sido agresiva con ellos. Además de eso, puntualizó que todos los hechos tuvieron raíz en asuntos personales.
A Bazúa la preguntan si ha vivido actos de violencia tras finalizada la relación, y respondió: “no fisicamente, pero un par de veces me mandó a la policía por ir a buscar a mi hijo en son de paz“, señaló.
El abogado pregunta: “ha recibido alguna amenaza por su presencia aquí en el día de hoy”, y él responde: “sí, que me iban a envolver en un problema de migración”, dijo.
Cabe mencionar que Gerardo Bazúa respondió a los cuestionamientos de los abogados de ‘Colate’, quienes insistieron en las agresiones de Paulina Rubio hacía él o hacía terceras personas.
Finalmente, en el programa ‘Ventaneando’ revelaron que el juez rechazó la solicitud de evaluación psicológica para la ‘chica dorada’.
Con información de TV Notas