ODESSA, Texas (KTLE) – La pandemia de coronavirus ha aumentado el riesgo de que la gente salga, pero al mismo tiempo, parece que el virus puede haber hecho las calles más seguras.
Tanto Midland como Odessa han visto una caída en los casos de personas conduciendo bajo los efectos de alcohol desde marzo.
La policía de Midland no puede decir con certeza que todo se deba a COVID-19, pero sospechan que los bares que cerraron durante meses tuvieron mucho que ver con eso.
Desde marzo de 2019 hasta el mes de agosto, se otorgaron 212 multas por conducir en estado de ebriedad en la ciudad de Midland, este año durante ese mismo periodo solo se registraron 152 multas.
La policía de Odessa también dice que ha tenido muchos menos DWI en 2020, un gran alivio para una ciudad que no es ajena a la conducción peligrosa.