Venganza consumada / Despojan al pueblo/ Javier Lutero Corral / Se carcajean en Dinamarca
SE PODRÍA escribir miles o millones de cuartillas sin exagerar, en contra de la reforma del Poder Judicial, que ya fue consumada por la supermayoría de Morena y aliados en la Cámara de Diputados, pero nada modificaría el escenario. López dijo va y fue…
Fueron 370 personas las que decidieron el negro futuro de 120 millones de mexicanos; democráticamente fueron elegidos por la mayoría, es cierto, pero no para destruir la democracia en este país; quién les concede la potestad, que ni López tiene.
En lo básico la democracia en cualquier país, son tres poderes con autonomía e independencia. El Ejecutivo con quién ya sabemos, con un contrapeso que debería ser el Legislativo, pero que en realidad está entregadísimo al Ejecutivo (presidente), es decir, a sólo una persona, no al pueblo que los eligió y al que en cada discurso sofista aluden como el que toma las decisiones del régimen populista socialista.
Falta el contrapeso mayor, el de la Constitución con el Poder Judicial de la Federación, eso se acabó, por lo menos en ese sentido se votó ayer por Morena y aliados y se acabaron los contrapesos, los equilibrios, en pocas palabras decíamos, asesinaron la democracia en México; las inversiones, la propiedad privada, los derechos humanos y no en muchos años, las libertades, de ese tamaño es el irreparable daño y la venganza de López Obrador.
Qué sigue, que la mayoría en el Senado de la República lo aprueba. Para alcanzar la mayoría calificada necesitaban tres votos más; ya compraron a dos senadores perredistas: En este momento van por un solo voto; el desgraciado pronostico es que lo van a conseguir; como decían los políticos de ataño, quién aguanta un cañazo de 50 o 100 millones de pesos, pues habrá muchos, pero el régimen sólo requiere para los efectos señalados sólo un “valiente” o “cobarde”; para el contexto es lo mismo.
Qué tanto sabe el pueblo del Poder Judicial, ese pueblo que tanto evoca López Obrador, Claudia Sheinbaum y la clase dorada del régimen y Morena, realmente nada, como decía un vecino: mientras me sigan llegando los tres mil pesos al mes con merecimiento o no, que el mundo ruede, con o sin el Poder Judicial.
QUE MÁS se podía esperar de Morena y la CuatroT en su obcecada protección al exgobernador Javier Corral Jurado, desde que concluyó su desastroso quinquenio en la entidad.?
Parecería que ya no habría mucha historia, pero vaya que sí: Lo iban a detener y una centena de agentes ministeriales con el fiscal de la CDMX, Ulises Lara, lo impidieron, pese a la orden de aprehensión por peculado agravado en su contra.
Morena le permitió que asumiera como senador, pese a se notificó al Senado de la orden de aprehensión, la que ignoraron y violentaron el Estado de Derecho y eso que aún no destruían el Poder Judicial.
Y, para que se constante que si había más, el martes lo designaron como presidente de la Comisión de Justicia en el Senado. Válgame Dios, ahora si que ni Lutero. Un prófugo de la justicia buscará justicia en el país. De plano increíble, pero así es la CuartaT.
POR CIERTO que la primera Ministra de Dinamarca Mette Frederiksen, intentó explicar a su Parlamento o parte de sus integrantes, que la declaración de López Obrador en el sentido de que de México tiene un mejor sistema de salud que aquel país, es otra mentira del Presidente de México.
La primera ministra, entró literalmente en un shock de risa, el que contagió a sus funcionarios y parlamentarios, se carcajearon de la mentira presidencial de AMLO.
Y es que López Obrador se voló la barda, con esa mentirota, pero aunque sea inverosímil hay quienes sí le creyeron, lo han difundido como cierto y hasta se encolerizan cuando alguien se atreve a decir que es una falsedad.
Eso se llama fanatismo, es un desequilibrio mental, creer algo porque sólo lo dice el endiosado presidente, para este caso, vaya que eso es delicado.
Ojalá y que este día no venga una réplica en la mañanera, en donde se anuncie una Diplomática pausa ahora con Dinamarca, bajo el pretexto de que se trata de una intromisión, violación a la soberanía nacional u ofensa a los mexicanos.