EL COORDINADOR de Comunicación Social, Antonio Pinedo Cornejo durante el gobierno de Javier Corral Jurado, modificó su estatus, en el proceso penal que se le sigue por peculado agravado.
Bajo la denuncia penal de la Fiscalía Anticorrupción, Pinedo fue arrestado en septiembre de año pasado; hasta ayer se encontraba internado en el Cereso uno de Chihuahua, luego de que un juez de control le dictó prisión preventiva.
Ahora el exvocero está regresó a casa para continuar el proceso, después de que aceptó, el criterio de oportunidad o ser testigo protegido, para alcanzar la libertad, lo que antes se conocía como condicional.
Para alcanzar este criterio, Pinedo tiene que desembuchar todo lo que sabe en materia de corrupción, nepotismo, influyentísimo, omisiones, que se presentaron en el quinquenio fallido de Corral, más otros detallines que pueda informar entorno a extorsiones y torturas, más otras trácalas de su exjefe.
Son malas noticias para el exgobernador Corral; para el prófugo de la justicia, el secretario de Finanzas, Arturo Fuentes y el fiscal Peniche, por citar sólo a algunos “superiores” del nuevo TP.
Qué no le sabrá Pinedo Cornejo a Corral?; la respuesta sencilla es, todo. Tenían una relación de casi 50 años, fueron socios, amigos compadres, hermanos, hasta que el poder y la corrupción lo separó. Ahora el odio y la sed de venganza se imponen.
Para que Pinedo haya alcanzado el Criterio de Oportunidad deberá proporcionar información fidedigna sobre los temas ya mencionados, en los que se presupone que el beneficio será mayor para el estado que el delito de peculado que mantenía en la cárcel al exvocero de Corral Jurado.
EL QUIÉN SE llevó el primer jalón en la parejera generada en el contexto de la Cabalgata Villista, fue el alcalde (reelecto) de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar.
Montando en su corcel llegó con banda, cantante personal y una porra de 150 caballerongos y desde luego su esposa.
Así triunfante arribó a Parral en donde se reunió con el alcalde César de la Peña, después acudió a una comida organizada por su amigos los que deben de ser cientos en la capital del Mundo.
Pero además, de Parral se traslado a Jiménez, en donde se reunió con el exalcalde de Villa López y con Jesús Manuel Vázquez Medina, funcionario de la Junta Municipal de Agua.
Luego fue en Camargo, sostuvo una reunión con varias decenas de habitantes del lugar organizada por Rodolfo Trillo, de cara “a lo que venga”.
Una gira provechosa para el alcalde morenista de Ciudad Juárez. Sin duda parecerían coincidencia, si es que en política existiera. Es claro que Pérez Cuéllar, ha iniciado la construcción de su estructura rumbo al 2027.
EL TEMA DE la infiltración de la delincuencia organizada o no, llegó a la Mesa semanal de Seguridad, esa que sólo sirve de escudo y da justificación a los nulos resultados en violencia e inseguridad.
Resulta que hasta ahora, quienes integran las Mesa de Seguridad, es decir, los gobernantes, los jefes policíacos y militares, atienden las infiltraciones, las que ciertamente históricamente se presentado y seguramente más marcadamente en los últimas décadas.
El tema se colocó en la agenda por la participación de policías estatales y municipales al servicio del crimen organizados, los hechos están presentes con agentes bajo investigación, en custodia y hasta un estatal que supuestamente se quietó la vida en el Cereso el fin de semana.
Extrañas cosas suceden; algo se tendrá que hacer, si no se quiere que en la percepción permanezca, que la delincuencia no sólo tiene a su servicio y en nómina a los agentes; ahora no sería descabellando pensar en mandos medios y superiores.
