Corral y su nómina secreta -Se operaba desde España -Quintana lideró aviadores -Malas, viene recorte
SI SE retoma el plan original del gobernador Javier Corral, de dejar sucesor con una de sus dos cartas fuertes, o sea con Víctor Quintana Silveyra por Morena o con el senador Gustavo Madero Muñoz, con el PAN, como se comentó en su momento, se entendería, sin justificar, la contratación de un ejército de personas en Desarrollo Social que operaría la campaña de Quintana.
El maquiavélico plan de Corral, se derrumbó primero, porque Quintana no alcanzó la candidatura a la gubernatura por Morena por muchas razones, la principal es que le dio la espalda a López Obrador cuando estaba en campaña (y a Morena) y optó por el proyecto de Corral.
Luego vino el derrumbe de Madero (y Corral), tras la persecución política en contra de la panista Maru Campos Galván, en donde el panismo se volcó a favor de la ahora gobernadora, a quien conceptualizó como una víctima.
Una variable más que involucra a Corral, Quintana y por ende al propio Madero, en la Operación Barcelona liderada desde España por Lucha Castro y que en Chihuahua coordinó Quintana Silveyra y compañía.
La idea de esa operación era llevar a la cárcel a Campos Galván en donde el beneficiario sería Quintana y por supuesto su amigo íntimo Javier Corral. Quien en ese momento se frotaba las manos pues tendría melón o sandía para sucederlo, lo que supondría un victoria personal, pero lo más importante, tapar el cochinero que heredaría, el que por cierto cada día se acrecienta.
Ayer la gobernadora, denunció de manera pública la existencia de 583 aviadores o becarios contratados por Víctor Quintana, cuando fue secretario de Desarrollo Social.
No sabe qué hacían, con quién se reportaban; se les pagaban 20 mil pesos por mes, es decir, casi doce millones de pesos extras con cargo al erario al mes, tan asqueroso como reproblable.
Se sabe ahora que los 583 becarios de Quintana eran activistas que trabajador a favor de Morena, en la hipótesis de que el bueno sería Víctor.
Se desplazaron de manera regional con mayor énfasis en la sierra tarahumara, realizando padrones, levantando censos, trabajo social y muchas promesas a las comunidades de que serían beneficiados con los programas sociales del Gobierno del Estado.
Así de macabra estaba la operación “becarios” de Quintana y Corral, bien tejida y manejada. En único pero es que, no pudieron descarrilar María Eugenia Campos.
Al revisar y retenerles las becas, surgieron de la nada los beneficiarios para reclamar sus pagos, solitos cayeron como moscas en los caramelos.
Corral en Galicia España, haciendo procesiones y siguiendo la ruta de San Santiago de Galicia; Madero en el Senado, con reciente renuncia al grupo parlamentario del PAN y Quintana apertrechado en el Congreso local como coordinador de los asesores de Morena.
Así quedaron estos personajes, quienes hace unos años, diseñaron la consecución del corralato en Chihuahua. Los siete pecados capitales los alcanzaron; ahora sólo queda el arrepentimiento y la penitencia; dicen que está última pronto llegará.
POR CIERTO este viernes concluyen los contratos laborales de alrededor de cuatro mil 600 contratos que el Gobierno del Estado, mantiene con igual número de servidores públicos en toda la entidad.
De ese número la secretaría de Hacienda ha recomendado una disminución de un 35 por ciento, pero ciertamente cada dependencia definirá quién se queda o quién se va, lo que quiere decir que, el porcentaje de desocupación ordenado puede aumentar a disminuir.
No obstante, la recomendación para las áreas gubernamentales va en el sentido de la reducción, del personal, por una indicación que de manera directa ha hecho la gobernadora Campos.
Por otra lado, es claro que en las áreas operativas no podrá haber disminución de personal como en la Fiscalía General, la Secretaría de Seguridad, Educación y Salud, que por sus propias características son intocables.
Dicho de otra manera no se pueden despedir policías, ministeriales, médicos (y enfermeras) y a los maestros.
Por lo tanto el recorte puede ser más marcado en áreas no estratégicas en donde hay personal con funciones duplicadas, los flotantes esos que andan de pasillo en pasillo, los aviadores y los que representan un lujo como choferes, mensajeros.