La encuesta de Massive Caller que pone a Morena muy por encima del PAN, y al interior del partido oficial a la senadora Chávez ganada dos a uno con respecto al edil Pérez Cuéllar, es tan descabellada que bien pudieron publicarla el 28 de diciembre, día de los Inocentes, haciéndola pasar por broma. La publicaron el seis de enero porque la toman muy en serio, como regalo de Reyes para la senadora Chávez, babeante por la oficina que hoy ocupa Maru Campos.
Y la tomaron en serio porque, en sus cálculos electorales, la cuchareada encuesta tiene pertinencia; Andrea Chávez quiere secuestrar la candidatura de Morena a base de billetazos, pagando encuestas, y luego de la misma manera resolver la elección constitucional con la narrativa de que es “un mero trámite”, enviando el mensaje de que “suceda lo que suceda en Chihuahua, el país, el mundo y el universo, fatalmente ella será gobernadora”.
Nada nuevo, sus estrategas siguen el librito del populismo versión cuatroté, calca de la estrategia de Claudia Sheinbaum, a su vez inspirada en las encuestas que dieron ganador al innombrable ex. No es que sean listos, la tienen muy aprendida. Con esa encuesta, Chávez abre formalmente su campaña.
Acepto, guardadas proporciones, existen similitudes entre CSP y ACh; a Claudia la empoderó un tabasqueño de apellido López, a Chávez la quiere empoderar un tabasqueño de apellido López. No por ser paisanos y tocayos de apellido son iguales, el primer López hizo ganar a su pupila porque la montó sobre una elección de estado, abusando de su enorme poder. ¿Tiene el segundo López poder para colocar a su querida senadora en el gobierno de Chihuahua?.
Pues mire, aquí como Cantinflas: yo diría que si, pero quién sabe porque puede que no. La razón es muy simple, el primer López tenía todo el poder en todo momento, no necesitaba de nadie para colocar a CSP en la cresta de la ola. El segundo López tiene poder prestado y no emana de Palacio Nacional, le llega desde su tierra con remitente en la finca donde habita su tocayo de apellido.
Visto así, en realidad no existe contradicción: puede hacer ganar a la senadora, sí y sólo si (como explicaba el maestro Pallares en clases de lógica) ambos López se mantienen empoderados sobre CSP y el segundo López en buenos términos con el primero, dos condiciones necesarias para el sí. No puede si en el curso de los próximos dos años sucede la ruptura esperada por muchos entre CSP y el tlatoani, o rompen los López, subrayado el “o”, pues en este caso sólo sería necesaria una de las dos condiciones para el no.
Los estrategas de los costosos asesores de Chávez, supuestamente muy acá, siguen el librito que tienen bien aprendido, pero podrían estar bordando sobre manta podrida, pues aunque parezcan similares los casos de CSP y ACh, en realidad son muy diferentes. El proyecto de Chávez está determinado enteramente por la suerte que corra Adán Augusto y vieron cómo a finales del año pasado la presidenta le hizo el fuchi, invitando a reuniones de agenda legislativa al poblano Mier?. Que tampoco se la crean tanto, Adán Augusto puede tropezar mañana y un frío peor del pronosticado para este viernes caería sobre la senadora Chávez.
En lo que cae o no el patrocinador tropical, lo prudente para sus adversarios internos y externos sería atorarla con encuestas espejo, no sea que mañana la ficción se convierta en realidad.
Rompeolas
Ni Salas ni Heliodoro se adelantaron, como tampoco ningún otro fiscal importante. De la politiquería llegaron, si, grillas muy estúpidas por la operación a César Jáuregui, para “repararle el remo”. Son los habituales “echen a rodar rumores”, tratando de hacerse los interesantes, como la versión anterior que soltó el más bisoño de los aspirantes a la presidencia municipal, sobre la imposibilidad del fiscal para involucrarse en proyectos políticos, por su menguada salud, decía. Nadie los tomó en cuenta, la realidad es que César permanecerá sólo dos días en el hospital y dos o tres semanas recuperándose en casa, desde donde despachará los asuntos urgentes. Que se recupere bien y pronto sin apresurar el paso innecesariamente, se han dado muchos casos que por aceleres pierden lo ganado, pregúntenle a Duarte con el helicopterazo y a Patricio que lo operaron dos veces de la muñeca.
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A los habitantes de la colonia “Cuarta Transformación”, antes “Fimesa I, II y III” no les gustó vivir en las calles “me canso ganso”, “acúsalos con su mamá”, “cabecita de algodón” y otras de igual abyección que, por sus pistolas, les impuso la alcaldesa de Tultitlán, Estado de México. Retiraron la nomenclatura, resistiendo incluso agresiones policiacas. Es una miserable colonia cuyos servicios básicos son deplorables, pero con la nomenclatura de calles muy bien señalizadas en guinda. Esa alcaldesa, esa colonia y esa comunidad son un microcosmos representativo de buena parte de la sociedad mexicana, con la diferencia de que los pobladores del ganso ya se insubordinaron. Más temprano que tarde también se hartarán millones que hoy están alucinados con la ensarta de mentiras cuatroté. Créanlo, señores devotos y sus aplaudidores, la mentira como la vileza no son para siempre.
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El segundo país más democrático del mundo, Venezuela (el primero es México, lo han dicho, tercero Cuba, cuarto China, quinto Rusia, y no menciono a Corea del Norte por estar en otro nivel, es la democracia absoluta), emprendió una feroz ofensiva contra sus opositores. Reportaron que detuvieron a María Corina Machado, rostro de la oposición, y están esperando que ingrese al país el excandidato “perdedor”, Edmundo González, para detenerlo también. Mientras más democrático se proclama el despotismo, más tiránico se vuelve. ¿Y el títere de Maduro?, feliz, mañana lo invisten nuevamente el Ejército y el siniestro Diosdado Cabello, poder tras el trono.
