Tarde nos llegó el reporte de que Alejandro Domínguez, el buen Alex presidente del PRI estatal, se reunió el fin de semana pasado con algunos presidentes municipales y diputados de su partido. Presumiblemente la reunión se realizó en su casa, donde aprovechó el momento para “externar sus aspiraciones por la gubernatura”. Habría dicho que lo consultó con la gobernadora Campos y Maru dijo adelante.
Alejandro es más largo que un día sin lonche, no es improvisado en política. Si realmente se acercó con Maru para pedirle su parecer sobre la gubernatura, es porque conocía la respuesta. Ya la imagino: “desde luego, Alejandro, empieza a trabajar en todo el estado”. La necesitaba para justificarse ante los suyos: “ya me dieron permiso”. Pero ambos jugaban a lo mismo, ella con el supuesto permiso y él con que ya lo trae.
Alejandro sabe que sus posibilidades de ser candidato son equivalentes a cero. Su autodestape sólo se entiende de dos maneras: O alito le dijo levanta la mano para encarecer la negociación en una posible alianza; o él se encuerdó sólo, tratando se subir sus propios bonos, llegado el momento.
Al prestarse al juego, sea por instrucción o iniciativa propia, Alejandro pierde seriedad, no es un novato para ir por ahí diciendo que quiere ser gobernador, cuando cualquiera sabe que no le alcanza. Eso que se lo deje al bisoño Loera, quien sueña despierto con la presidencia municipal.
Tony Meléndez es el único priista que podría tener alguna posibilidad de encabezar una eventual alianza opositora, por su conocida popularidad y don de gente. Pero él no suda calenturas ajenas, aunque si por esos extraños caminos de la política le llega de rebote, se le hace un nudo en la garganta y se le atragantan las palabras antes de poder decir no.
Con otra, abusados en esta parte. No den por segura una alianza PAN-PRI, para el 2027 falta mucho tiempo y para entonces no descarto una alianza del PRI, pero con Morena. Alito es alito, no pierdan de vista esa posibilidad.
Rompeolas
Fuentes morenas confirmas que ciertos liderazgos al interior del partido promueven una sesión extraordinaria de Consejo Estatal, con el único fin de tirar a Brigithe Granados del Comité Directivo Estatal. Seguramente son los mismos que organizaron la rechifla contra la joven dirigente, quien sufrió durante la visita de Luisa María Alcalde y el hijo del tlatoani. Ya sabemos que suelen canibalizarse, es su condición histórica, pero no sería pertinente un cambio de dirigente en estos momentos, las campañas serán hasta el 2027 y para entonces seguramente habrá nuevo dirigente. Sin embargo así son, se despedazan entre ellos. Atrás del complot estaría A.M. ¿será? Ni lo duden, por razones personales trae atravesada a Brigithe.
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Myriam Hernández, todavía presidenta del Supremo Tribunal de Justicia, no se quedó conforme con el desechamiento de la controversia constitucional promovida contra las reformas constitucionales del Plan C. Quiere llevar el caso hasta las últimas consecuencias, ahora por la vía del amparo. Suerte, pero tengan presente que con la Corte doblada todo esfuerzo será inútil. Mejor irse resignando a que se acabó, pronto serán otros los que ocupen esas oficinas. Maru aprovechará la barata, hará en el Poder Judicial del estado, lo que el tlatoani en el Poder Judicial de la Federación. ¿Y los jueces de Lucha? Los primeros en la lista.
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El director de Derecho, César Gutiérrez, debería tener más cuidado con algunos de sus maestros, verdaderos abusones que se aprovechan de su posición. Trascendió que a la oficina de Liz Aguilera llegó una denuncia contra un maestro de iniciales E.V., a quien sus alumnos acusan de abusón, prepotente y proclive a humillarlos llamándolos débiles mentales por ser de la generación de cristal, mediocres verguenza del derecho. Hasta donde se sabe este abogado petulante no ha ganado un juicio y quiere ponerse de ejemplo. Fuera Mazpúlez como quiera, pero este presuntuoso incompetente no tiene ni cara, dicen alumnos en pasillos.
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El hijo amado y Luisa María Alcalde presumen una cartilla moral para dirigentes de la cuatroté y dos de sus principales postulan con cinismo inaudito que los verán más seguido viajar en helicópteros, por que se deben trasladar por “aire, mar y tierra” atendiendo a los más pobres. Monreal es un cínico completo, el corrupto sindicalista Pedro Haces otro. Los austeros del régimen se están quitando la máscara, su respuesta frente a la denuncia ciudadana es un “sí y qué”. En eso están terminando, en presumir despilfarros y complicidades con el gran capital.
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En una declaración que no duró ni tres minutos, el embajador gringo, Kent Salazar, desacomodó al gobierno mexicano. Sólo dijo lo que todos acá sabemos, que los abrazos contra criminales fracasaron y que el hoy innombrable rechazó inversiones en seguridad, trastornado la coordinación entre los dos países. La presidenta Sheinbaum intentó desautorizar al embajador, acusándolo de ser dispar, pues “un día dice una cosa y luego otra”. Inmediatamente reviró el Departamento de Estado norteamericano, cuyo vocero salió en defensa de Salazar. A mes y medio de iniciar su gobierno y cuando faltan otro tanto para que asuma Trump, la relación México y el Imperio quedó muy tensa. CSP hace suyos todos los pleitos heredados del tlatoani, así cuando.
