*Es el SNTE actuando como la CNTE
*Escolares víctimas de la politiquería
*La enorme contradicción del paro
*Y si los padres entregan los libros
*Gutiérrez ¿ofrenda conciliatoria?
*La parsimonia de Gabriel Díaz
Muy lejos llegó el SNTE con el absurdo pretexto de los libros, cerrar escuelas debería ser la última medida en una cadena de diferendos con el gobierno, luchando por sus derechos laborales o nuevos y legítimos beneficios gremiales. No les han quitado prestaciones, tampoco reducido el salario ni violentado el contrato colectivo, todos sus beneficios como gremio sindical están siendo respetados. Si por algo deberían levantar la voz y demandar con firmeza una solución inmediata, es por la porquería de servicio médico que reciben en el ISSSTE. Nada, Zendejas y los maestros de la octava se lo tragan completito sin hacer gestos, pero están muy preocupados por la falta de libros.
Nadie se traga su engañifa, tanto Zendejas como Quiroz sirven sumisos a los vulgares intereses politiqueros del populismo, sin detenerse a pensar en el daño que causan a los niños por quienes dicen actuar. Su avieso propósito es desestabilizar al estado y a falta de motivos reales no les quedó más que recurrir a un tema que necesitan retorcer para justificar el atentado contra la niñez. El paro entraña una enorme contradicción: cierran las escuelas por que no hay libros para que los estudiantes aprovechen, ¿¡con escuelas cerradas aprovechan muy bien¡?.
Este movimiento viene con un altísimo contenido político, tanto que cambió el rostro de dos organizaciones sindicales usualmente comprometidas con la educación, Octava y 42. Es el SNTE actuando como la CNTE, aquella organización que, años pasados, paró escuelas durante meses en Oaxaca y Chiapas con exigencias insospechadas. Su incursión más reciente sucedió en Michoacán, cuando un puñado de maestros detuvo durante un mes, poco más, el puerto más importante del país, con perdidas multimillonarias para la IP. Entonces querían desestabilizar al gobierno perredista de Silvano Aureoles.
Hoy el SNTE de Zendejas y Quiroz hace exactamente lo mismo que la CNTE en Michoacán, tomó de pretextos la insuficiencia de libros sabiendo que la instrucción superior es generar inestabilidad en otro gobierno de oposición. Pero han ido demasiado lejos y con un tema de la mayor sensibilidad, su atrevimiento no es contra el gobierno estatal, ni siquiera contra la gobernadora Campos, preocupada por entregar los libros, es contra miles de padres de familia a quienes mortifican, obligando a que sus hijos permanezcan en casa. ¿Cuánto aguantarán los padres teniendo que encargar a sus hijos donde pueden para reportarse al trabajo?.
Un día está bien, dos quizás, pero al tercero no habrá vecina, hermana, o abuela que se los cuide. Aquí está el punto de inflexión; mañana o pasado los padres de familia serán los primeros en exigir que abran las escuelas, desesperados por que no pueden faltar al trabajo y tampoco tienen donde dejar seguros a sus hijos. ¿Que hará el sindicato entonces, echarle la culpa a Maru? Son capaces de eso y más, quieren erosionar su liderazgo social, aunque a los ojos de todo Chihuahua son ellos, su dirigencia nacional y las mentes que los manipulan quienes decidieron cerrar y mantener cerradas las escuelas.
Los libros llegarán pronto, hoy mismo se desistió una de las organizaciones amparadas, la Clínica de Derechos Humanos. Es cosa de días para que la Asociación Estatal de Padres reciba la negativa a su recurso o también se desista, ¿Que harán entonces Cendejas y Quiroz? Se encadenarán a Palacio exigiendo mejores bebederos y baños limpios. Atempérense, no agachen la cabeza y digan sí a cada instrucción que reciben de Cepeda, quien a su vez recibe línea de Palacio Nacional. Las campañas no han empezado ¿O tratan de mostrar obediencia ciega con la esperanza de ser recompensados con el envidiable fuero legislativo? Se vale, pero no a costa de golpear a los niños y a sus padres trabajadores. Los niños no deben quedar en medio de la politiquería.
Rompeolas
Santiago de la Peña ha estado muy pendiente de la emergencia de los libros, procurando que los amparados se desistan o cabildeando con el juez para que adelante la resolución. Ambas soluciones son pertinentes y con seguridad una de las dos llegará pronto. En previsión de lo que el tiempo encoja, una medida furtiva podría ser la inmediata solución. El mandato judicial ordenó al Gobierno Estatal detener la entrega, pero no a padres de familia ni a maestros, ellos podrían hacer el trabajo y el gobierno cerrar los ojos. ¿Quién se los podría impedir? A veces las soluciones son más sencillas de lo que parecen.
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Quien sabe, pero sospecho que la secretaria de educación, Sandra Gutiérrez, podría ser entregada en prenda a la sección octava. Aunque la instrucción de cerrar viene del SNTE y más allá, Gutiérrez podría ser una ofrenda para acelerar la solución, está muy confrontada con el dirigente de la octava.
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Muy apurado el secretario de gobierno, con varios fierros que atender al mismo tiempo; ahora los migrantes, enseguida los maestros y mañana lo que venga, por que el asedio seguirá con absoluta certeza. Así le tocó, ahora se gobierna administrando crisis y por definición es él quien tiene la obligación de resolverlas… o al menos paliarlas.
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Alfredo Chávez y un grupo de diputados locales salieron a medios para denunciar la politiquería del SNTE, cuyos líderes recibieron la instrucción de incendiar Chihuahua con el pretexto de los libros. Es al menos un esfuerzo de solidaridad con el Ejecutivo, pero los observadores desocupados de café preguntan por el líder estatal del PAN ¿Dónde está Gabriel Díaz cuando se pelea una de las batallas prelectorales más intensas? Envuelto y a cobijo de su enorme parsimonia, respondió un socarrón. Insolidario ha sido el líder del PAN con el gobierno de su partido, está ausente por completo en los grandes temas de la política estatal.
