*Hartazgo juarense; indolencia de AMLO
*35 mil migrantes ¡y siguen llegando!
*Maru, enérgico reclamo en la frontera
*Bien plantado, Baeza llama criminal a la 4t
*Cruz quedó atrapado en su politiquería
*¿Cuándo vuelve Adán augusto a Juárez?
*Corte, un timbre de institucionalidad
Frente al hartazgo e impotencia de la comunidad juarense, desesperada porque el centro de su ciudad es tomado por extranjeros tirados a la violencia, y la indolencia pasmosa del gobierno federal, desentendido de la crisis migratoria, la gobernadora Campos elevó la voz en la frontera, exigiendo al presidente López Obrador que defina una estrategia coherente de migración y se comprometa con la ciudad que los recibe.
Sólo con citar el número de migrantes, ¡35 mil y contando! La gobernadora dimensionó el tamaño de la crisis. Hablamos que de la noche a la mañana llegó al centro de Ciudad Juárez una población similar al número total de habitantes de un municipio como Saucillo y todos los refugiados comen, beben, orinan defecan y necesitan un lugar donde dormir. Ponga esos 35 mil en el centro de Chihuahua y dimensionará el enorme problema que el gobierno federal dejó en Juárez. Es una olla de presión a la que siguen atizando fuego.
Es comprensible que los juarenses se harten y si encima muchos de ellos presentan rasgos violentos, pues aparte de los 40 muertos en el incendio de las mazmorras de migración, han trascendido enfrentamientos que involucran armas de fuego y otras riñas violentas, como la del domingo pasado donde varios resultaron heridos. Es una irresponsabilidad absoluta dejarlos mendingando o forzarlos al hurto.
Obviamente la gobernadora también se hartó, se indigna de la indolencia con que se conduce al gobierno federal, por eso las palabras poco diplomáticas cuando se dirigió a los medios. No la recuerdo más decidida contra el gobierno de López Obrador: exigió una definición clara de la política migratoria, destacó la inacción del gobierno federal, reclamó la negación a controlar el flujo migratorio y condenó la pasividad e insensibilidad que calificó de pasmosa, lamentando que sigan llegando más migrantes a la frontera.
El presidente se subordina abyectamente al Imperio, comprometiendo a México como “Tercer País Seguro” y deja la enorme responsabilidad de atender los migrantes en los gobiernos estatales y municipales, cerrando los ojos a la crisis que generó su decisión timorata frente al poderoso. El cinismo e indolencia de López Obrador es desesperante; hace su tiradero y exige que otros lo recojan. Demencial.
Ha dejado suficiente constancia de que le importa tres cacahuates lo que digan “los conservadores”. Así mueran otros cuarenta su contumacia criminal lo mantendrá indiferente a la emergencia humanitaria y social, pero el llamado de la gobernadora sirvió para visibilizar de nuevo una crisis que López Obrador, Adán Augusto y todo el régimen cuatroté pretende sepultar más de prisa que a los muertos.
Rompeolas
Con agenda propia, el exgobernador Fernando Baeza salió a medios en la ciudad de Chihuahua y se pronunció contra lo que considera una política criminal del gobierno federal. En éste país no es sencillo que un político llame criminal al gobierno del tlatoani, Baeza lo hizo y resumió las razones: responsabilidad en la muerte de los 40 migrantes, los más de 130 muertos por la explosión del ducto en Hidalgo, los feminicidios diarios –once en promedio- la negación de medicamentos a niños con cáncer, los más de 700 mil muertos por la pésima gestión de la pandemia, tratando de frenarla con estampitas, y desde luego su política de abrazos y no balazos que ha dejado más inocentes muertos que los gobiernos de Calderón y Peña. Bien plantado Baeza, es digo de reconocer su convicción, un hombre sobre el octavo piso de su vida que nada puede pedir para sí, desafiando al presidente más poderoso que ha tenido el país desde Plutarco Elías Calles. No queda sino felicitarlo por su convicción, es el único de los políticos de alto perfil que ha salido en defensa de la democracia y contra el populismo autoritario que nos amenaza. Bien por él.
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Con la cabeza “gacha” y mirando al piso permaneció el alcalde Pérez Cuéllar la mayor parte del reclamo que Maru Campos hizo al gobierno de López Obrador, exigiendo que defina una política migratoria y detenga el flujo. Cruz quedó atrapado entre las exigencias de los juarenses, hartos de la invasión extranjera, su fingida devoción al “líder amadísimo” y las aspiraciones de continuar al frente del municipio. Antes de los 40 muertos declaraba ufano que ya estaba llegando a su límite, después no ha sido capaz de pronunciarse clara y contundentemente a favor de los juarenses. Incongruencias de un político trepador sin convicciones.
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Hasta antes de que murieran los 40 migrantes –para algunos asesinados- Adán Augusto López visitaba Ciudad Juárez cada tercer día, particularmente acompañando a la joven diputada, razón por la cual los juarenses lo motejaron “Maduro Romeo”. Ahora no quiere ni escuchar el nombre de nuestra querida frontera, desentendiéndose de la tragedia en la forma más irresponsable y cínica, siendo que por definición de cargo es uno de los principales responsables. Pero la campaña sigue, quiere ser presidente del país. Hay que joderse con éstos salvadores de la patria.
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En el arrebato populista que devasta las instituciones nacionales, la Suprema Corte de Justicia de la Nación se proyecta como poderoso faro de esperanza. Ocho ministros, el mínimo necesario para evitar atropellos a la Constitución, resistieron las presiones de Palacio Nacional e hicieron valer su independencia frente al poder presidencial. Seco, contundente, inapelable su voto contra la trasferencia de la Guardia Nacional a las Fuerzas Armadas, parando de una la pretensión más autoritaria de López Obrador. Un timbre de orgullo y respeto a la institucionalidad tan acosada por el régimen de la cuatroté. En la mañanera escupirá su conocida ensarta de injurias contra los ministros y contra la Corte en general , recibió un golpe a su soberbia exaltada, pero no le servirá más que para el desahogo, ahora los mexicanos libres saben que hay una institución que contiene al autócrata, pues los magistrados peleles al régimen son únicamente tres, muy peleles y muy rastreros pero solamente tres. La sentencia da sinceras esperanzas para enviar por el caño de la ignominia al Plan B.
