“Él quiere agarrar la manejadera de la puerta, abrir la puerta. Y sí la abrió un poquito, pero uno de mis compañeros de los que venía ahí conmigo, fue y lo agarró”, comentó un pasajero
Agencia Reforma
Ciudad de México.- Uno de los pasajeros del vuelo 3041 de Volaris, que Mario N intentó secuestrar y desviar, consideró que fue un acto de terrorismo, porque el hombre trató de abrir la puerta del avión y puso en riesgo la vida de todos.
“Él quiere agarrar la manejadera de la puerta, abrir la puerta. Y sí la abrió un poquito, pero uno de mis compañeros de los que venía ahí conmigo, fue y lo agarró. Mi vida estuvo en riesgo, la vida de todos los pasajeros estuvo en riesgo, porque fue un acto de terrorismo, se diría, porque al abrir la puerta, todos íbamos a morir”, dijo el pasajero Gerardo González.
El vuelo 3041 despegó a las 7:17 horas del Aeropuerto Internacional de Guanajuato, en Silao, con dirección a Tijuana, hasta que Mario, de 31 años, desató el pánico entre la tripulación y los pasajeros, al intentar desviar el curso del avión a Estados Unidos.”Venía con su esposa y venía con tres niños. Ella nomás pedía ayuda, y él lo que quería es llegar al aeropuerto de San Diego, porque él quería pedir asilo político. Él venía de Pénjamo, Guanajuato, y había recibido muchas amenazas del cártel de allá y por eso venía a pedir asilo político”, contó González.
El pasajero relató que Mario empezó a gritar y que quería que se abrieran las puertas del avión, porque supuestamente se encontraba experimentando un ataque de ansiedad.
Ante los llantos, gritos y reproches de los pasajeros, González dijo que el personal de la aerolínea sólo les pedía que se tranquilizaran, mientras ellos exigían que lo sostuvieran y lo encerraran en el baño.Por su parte, el pasajero Jesús Torres, oriundo de Guanajuato pero con residencia en Estados Unidos, logró contener a Mario y controlar la situación, luego de que el agresor tomara a una de las sobrecargos del cuello y la amenazara con un lapicero.
“Yo creo que hice la parte humana, mi parte fue la parte humana de hacer las cosas lo mejor posible, lo que más se me vino a la mente, el velar por la seguridad de la aeromoza y de él mismo, por su confusión en la que se encontraba”, expresó.-¿Sintió miedo en algún momento de que trajera algún arma?, se le preguntó.”Sí, por la inseguridad que se vive en el país y porque no hubo mucho apoyo por parte de las autoridades, entonces es un poquito turbio la situación que se está viviendo”, dijo.
Los pasajeros aseguraron que tras el evento no recibieron ningún tipo de apoyo psicológico por parte de la aerolínea.El vuelo se desvió hacia el Aeropuerto Internacional de Guadalajara, Jalisco, donde aterrizó a las 8:15 horas.Veinte minutos después de aterrizar, el personal de Volaris abrió las puertas del avión y entregó al sujeto responsable a la Guardia Nacional.
Al momento en que lo trasladaban para ponerlo en custodia de la FGR, alrededor de las 13:00 horas, el oriundo de Pénjamo se lanzó contra el chofer de la Guardia Nacional que lo transportaba y provocó un choque contra una estructura metálica del Aeropuerto Internacional de Guadalajara.El avión finalmente siguió su curso original a Tijuana, donde arribó a las 14:20, tiempo de la CDMX.