Este año el servicio de mantenimiento subió 10%; las llantas, 15%; aceites lubricantes, 23%; incluso bujías, bombas de aire y mangueras cuestan 30% más.
Norte Digital/Por Pavel Juárez
Por el incremento en la inflación, enviar el vehículo a un servicio de mantenimiento ya es 8.06 por ciento más caro que el año pasado.
Por ejemplo, un servicio de afinación para un automóvil de 4 cilindros, costaba, en promedio, 2 mil 188 pesos antes de la pandemia; en junio de este año, se elevó a 2 mil 400 pesos.
Es decir, un incremento de casi el 10 por ciento, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Pero esto es solo un promedio de los tipos de mantenimiento, como afinación, pintura y hojalatería, entre otros.
Si se poncha un neumático, reponerlo cuesta 15.24 por ciento más que el año pasado. Se trata de una de las mercancías que más han subido su precio para los usuarios de automóviles.
Los aceites lubricantes se han encarecido todavía más, alrededor de 23 por ciento.
Incluso piezas más comunes para dar mantenimiento a un automóvil, como bujías, bombas de aire y mangueras, entre otras; tienen precios hasta en 30 por ciento más altos.
La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros informó que ya se están resintiendo los efectos de la inflación; esto porque el costo de algunas refacciones, provocan que la reparación de los autos cueste más.
Eso sin contar el incremento de la gasolina este año. La gasolina de bajo octanaje, regular presentó un incremento de 7.29 por ciento, según el Inegi.
Los estímulos fiscales para la gasolina regular pasaron de 2.18 pesos por litro en promedio durante junio de 2021 a 11.59 pesos el mes pasado; un aumento de 431 por ciento, según datos de la Secretaría de Hacienda (SHCP).
Para quienes el auto es su principal herramienta de trabajo puede ser razón suficiente para tomar medidas más drásticas.
Las estrategias para ahorrar van desde acordar meses sin intereses en talleres mecánicos, hasta usar gas en lugar de gasolina.
Esto resulta más barato. Este tipo de combustible proporciona casi el doble de kilómetros recorridos por el mismo dinero que se gastarían en gasolina.
Los seguros de autos también subieron de precio. Los precios en estos productos reportan un aumento de 10.31 por ciento anual.