Ojinaga Chih.- “Tuve que bajar el costo de las rosas; la maceta la estoy dando en 150 pesos”, dice una comerciante afectada por las pocas ventas en Ojinaga.
Los locatarios informan que sus ganancias han bajado hasta 80%, lo que afecta a más de 30 familias que dependen sólo de esto; sin embargo, a esta cifra se le tendría que agregar a las personas que dependen de la producción.
Uno de los regalos tradicionales para festejar una de las fechas más importantes para los mexicanos son las flores, pero este año, tras la decisión de las autoridades en Ojinaga de cerrar, todo cambió.
Con lágrimas, la señora Olga Jiménez, una de las vendedoras más longevas, señala que ha tenido que bajar los precios de sus productos para que se vendan y no se regresen a sus viveros y representen pérdidas.