Actualmente trabaja en la FGE en la unidad de Delitos contra la vida
Alejandra Sánchez / El Diario
Con tan sólo 28 años, Jorge Alonso Ballesteros Martínez ha sabido poner en alto sus raíces y su profesión como abogado, al ser uno de los mejores elementos con los que cuenta la Fiscalía General del Estado (FGE), dentro de la unidad de Delitos contra la Vida.
Hoy, se celebra en México el Día del Abogado fecha que fue decretada por el presidente Adolfo López Mateos en 1960. Esta, es una conmemoración en la que se reconoce el trabajo y esfuerzo de aquellos que apelan por la justicia y en el caso de Jorge, ha sido así; ya que a lo largo de su trayectoria ha tratado de hacer las cosas de forma correcta y de ayudar a las personas que más lo necesitan.
“Yo estudié en la Universidad Regional del Norte, aquí en Chihuahua. Soy originario de Parral y tanto mi hermana como yo somos de ascendencia Pima, es decir, del pueblo originario Pima O`oba, el cual tiene mucha presencia en Chihuahua, Sonora y parte de Durango. Nuestros abuelos eran Pimas y de ahí cargamos esa sangre y con mucho orgullo lo puedo decir”, externó el abogado.
La idea de dedicarse a esta profesión surgió debido a que su hermana también es abogada y de alguna manera ella lo inspiró.
Él, tiene ya alrededor de cuatro años y medio dentro de la FGE como Ministerio Público y según sus palabras, este era uno de sus grandes sueños.
“Desde pequeño quería ser funcionario público ya que quería contribuir de alguna manera en la sociedad y además, quería poder ayudar a las personas sin distinción alguna. Entre nuestras tareas está la procuración de justicia, audiencias de control, de juicio, trabajo de campo, entrevistas declaraciones, cateos, entre muchas otras funciones debido a la complejidad de la unidad y del delito pues es de las unidades más complejas, que lleva muchas labores y este trabajo es 24/7”, dijo este joven.
Entre los retos a los que Jorge se ha enfrentado se encuentran las audiencias y sobre todo, el encarar a la defensoría pública y/o particular con abogados de mucha experiencia y de mucho renombre.
“Son retos que conllevan la capacidad de uno, es cuestión de la disciplina y de como actuamos. Hay que contestar y reaccionar en cuestión de segundos y por eso es importante capacitarse de manera constante. Otros de los retos es que también tenemos contactos con personas que son probables responsables o que se logran sentenciar y que de alguna forma representan algún grado de riesgo o algún peligro por estar involucrados en este delito de homicidio y hay que decirlo: uno a veces también siente miedo… Pero hay que echarle la mayor de las ganas”, expresó.
La carga emocional que conlleva trabajar en estos delitos es fuerte y debido a eso, Jorge la canaliza a través del deporte.
“Tengo desde los quince años dentro del boxeo representando al municipio y al estado en diversas partes del país; de alguna forma trato de que esas emociones que se producen en el trabajo sean liberarlas a través de una actividad física. Este ejercicio, es de mucha disciplina, consiste en levantarme a correr en la mañana, a entrenar en la tarde, comer bien y bueno, esa disciplina que he adquirido allá, la empleo también aquí”, refirió el abogado.
Jorge, junto con su hermana y su cuñado, quién es gobernador tradicional del pueblo Pima, han apoyado a personas que conforman a esta etnia por medio de entrega de despensas, de conseguirles proyectos nacionales, entre otras cosas.
“En mi trabajo tengo contacto directo con personas víctimas y ofendidos, a veces los familiares de algún fallecido son de pueblos originarios y lo que hacemos es que en coordinación con el tribunal del estado solicitamos el apoyo para que nos presten traductores e interpretes para que nos den ese derecho humano que ellos tienen de manifestarse”.
Al preguntarle que representa para él dedicarse a la abogacía, Jorge dijo que significa un reto muy grande y constante.
“Son muchos retos, son nuevas oportunidades de crecer laboralmente y personalmente; es una forma de contribuir a la sociedad como lo hacen muchos compañeros de esta fiscalía. Son muchos retos los que conllevan ser un servidor público y estoy orgulloso de representar a la profesión y a las víctimas por que la ola de violencia que se vive el estado y en el país es muy fuerte; pero nosotros de alguna manera contribuimos para poder procurar justicia”.
En su mensaje a sus compañeros y compañeras, él invitó a seguir haciendo esta labor como lo han hecho hasta hoy, en ese grado de profesionalización en la cual desempañan su cargo ya que la lucha no termina nunca.
“A aquellos jóvenes que pertenecen a algún pueblo y en general les digo que no hay nada imposible en esta vida, todo se puede lograr. En lo personal he batallado en las oportunidades que se nos brindan, en no tener los recursos, pero de alguna forma hay la manera. Yo a través del deporte he obtenido muchas oportunidades pero esa no es la única manera para lograr los sueños; yo sigo estudiando, tengo dos maestrías y sigo capacitándome. Todo es posible sólo hay que tener disciplina y contar con la base de los valores que se imparten en la familia”.