Uno concluye que el submundillo de la política está de cabeza, cuando ve que acaba de pasar una elección y los ganadores ya están concentrados en la siguiente, en vez de atender los cargos para los que fueron electos o designados. No hay momento de repeso, en su mente la elección del 2027 ya llegó.
Están enredados en el tiempo y los malos ejemplos del “caudillo oculto”, pensando que mientras más menean el abanico más posibilidades tienen. Falso, para la próxima elección falta que pase toooooodo el 2025 y casi toooooodo el 2026, antes de que haya candidatos y el proceso quede legalmente instalado.
En su impaciencia no les importa, ellos ya se vieron y le darán hasta donde tope. Si el dinero que tiran fuese de ellos y no distrajesen tiempo de sus obligaciones, como quiera. Pero la verdad es que ocupan dinero público en su promoción y descuidan sus deberes con los ciudadanos. Así no.
Como no puede frenar sus ímpetus, la gobernadora Campos les hizo un extrañamiento: “Primero que nada tienen que dar resultados, tienen que usar su tiempo y su disposición para dar resultados. Quien no tenga resultados no puede aspirar a ningún puesto de elección popular”. En otras palabras, bájenle dos rayitas, primero es la responsabilidad, luego la politiquería electorera.
Los aspirantes del oficialismo están desbocados y seguirán desbocados, sobre todo el edil juarito y la estridente senadora. Ambos juegan con las reglas de su partido, haciéndose notar con la esperanza de salir bien en la encuesta. También se engañan, esa encuesta como las anteriores, la gana quien decide el demagogo. Tiran dinero de oquis.
Los de oposición no pueden caer en su juego de forzar los tiempos, ellos tienen un compromiso político con la gobernabilidad del estado, ayudan atendiendo sus obligaciones y moderando las aspiraciones. Calma, recuerden que la política no es, va siendo y, hasta lo visto por ahora, no hay condiciones objetivas para secuestrar candidaturas. La prisa, en muchos casos, es señal de inmadurez.
Rompeolas
El acuerdo PAN/Morena en el Congreso local sigue sobre rieles firmes, sin contratiempos eligieron en la Junta de Coordinación Política al comité de notables que cernirá los candidatos a jueces y magistrados. Y desde luego, los cinco llegan con la firma del acuerdo; tres del PAN, dos de Morena, como debe ser en las negociaciones entre fuerzas opositoras. Y no tengan duda, abogados puritanos, así serán nombrados también los jueces y magistrados o sinceramente alguien ha pensado que la elección va en serio.
……………
Punto aparte el panchito del diputado Avítia contra Cuauhtémoc Estrado, coordinador de los diputados oficialistas. Escandaliza simulando boicotear los acuerdos entre las dos fracciones mayoritarias, pero en realidad quiere su partecita de pastel. Entre devotos que se arreglen, si la juegan limpio hay para todos. Una pregunta, sólo por mortificar: ¿Quien es la gran perdedora con esta reforma judicial?. Exacto, Luz Estela Castro, bajarán a todos los jueces que metió de focha cuando regenteaba el Consejo de la Judicatura. Ahora los nombres de la cuota morenista serán palomeados por Ariadna Montiel. ¿Dudas u observaciones, Brigitte?.
…………….
Sería genial entrar el top 10 de las economías mundiales, recobraríamos el prestigio mundial que tuvimos en algún momento tuvimos como país. El asunto es que unos son los deseos y otras las realidades del país y del mundo. En un alarde de optimismo inusitado, nuestra presidenta CSP promete colocarnos ahí, pero la proyección del Fondo Monetario Internacional es que pasaremos del lugar doce al quince, según la proyección de crecimiento económico. Con la incertidumbre jurídica y la violencia que asfixia al país, nos irá bien si al finalizar el sexenio terminamos en el lugar quince. Esa bravuconada estridente perseguirá a la presidenta todo el sexenio.