Marco con músculo / El resto en solitario y grillas / El 11 pinta Verde / Más migrantes… abandonados
FUERA de la alianza integrada por el PAN, PRI y PRD, el arranque de las campañas por la Presidencia Municipal de Chihuahua, han estado desangeladas.
Marco Bonilla Mendoza quien busca la reelección, arrancó con un evento masivo en la Plaza de Armas a un costado del Palacio Municipal, en donde logró concentrar unos cinco mil asistentes.
El candidato de Morena y PT Miguel La Torre Sáenz, inició en la colonia Unidad Proletaria al sur de la ciudad, con unos 600 asistentes.
Por lo menos esos se contabilizaron, antes de que decenas de militantes del PT, abandonaran el lugar, luego de una discusión de la dirigente estatal de Morena, Brigithe Granados y América Aguilar del Partido del Trabajo.
Enrique Valles Zavala de Movimiento Ciudadano, arrancó en lo que era la plaza de toros; registró una asistencia muy pobre, digamos que de decenas. Mientras que el Partido Verde, recorrió los tianguis y algunos parques de la ciudad.
El resto de los contendientes por cierto de los nuevos partidos Republicano y Pueblo, no realizaron eventos específicos y menos masivos; se concretaron a hacer presencia y proselitismo en algunos cruceros de la capital.
En los arranques, los candidatos estuvieron acompañados del resto de los aspirantes a las diputaciones locales, sindicatura federales y senaduría.
POR CIERTO en esta misma semana el candidato a la diputación por el Distrito 11 del Partido Verde Ecologista, Rodrigo Gómez Villarreal, tendrá un arranque formal en Ojinaga y Manuel Benavidez, luego en Rosales y Meoqui, su tierra natal.
El Distrito 11 local, lo integran 10 municipios y es el más grande territorialmente hablando.
El doctor Gómez Villarreal estará haciendo arranques en cada uno de los municipios; en la agenda preliminar se establecen tres visitas a cada uno de ellos.
El candidato registra un buen avance en los primeros días de campaña arropados por liderazgos regionales, que en la mayoría se han sumado desde la sociedad civil.
ALREDEDOR de dos mil migrantes están varados desde hace tres días en el ejido Nuevo Sacramento en el sur de la capital.
Son mujeres, niños y desde luego varones quienes viajaban en La Bestia con la intención de llegar a Ciudad Juárez y luego a los Estados Unidos.
El viernes el tren paro en esa subestación y ya no avanzó más. Personal de Ferromex les pidió, primero no abordar y luego bajar, pero ni una ni la otra cosa sucedió.
Desde el viernes esperaron a que avanzarla La Bestia; ayer domingo algunos bajaron de manera voluntaria y otros empezaron a deslazarse hacia la capital.
El gran problema es que no tienen agua, alimentos y menos artículos de higiene.
Lo más grave es que ninguna autoridad de los tres niveles a atendido a los migrantes.