¿Cuánta es demasiada? ¿Debería reducirla? Preguntamos a los expertos estas y otras cuestiones sobre el sodio
The New York Times
Sin sal no podríamos sobrevivir. Los nervios fallarían, los músculos no podrían contraerse.
Sin embargo, los expertos dicen que la mayoría de las personas consumen demasiada, incrementando el riesgo de padecer hipertensión y enfermedades del corazón.
En Estados Unidos, por ejemplo, aproximadamente el 95 por ciento de los hombres y 77 por ciento de las mujeres consumen más de 2 mil 300 miligramos por día, un límite que recomiendan los oficiales federales de salud.
Aunque en las últimas décadas, los investigadores no se han puesto de acuerdo acerca de exactamente cuánta sal es demasiada, algunos sugieren que los lineamientos federales son muy estrictos.
Esos reportes captaron nuestra atención y dejaron a muchas personas confundidas, comentó el Dr. Lawrence Appel, profesor de Medicina de la Universidad Johns Hopkins.
Una investigación más reciente ha aclarado algunas de esas dudas.
¿Cómo afecta la salud la sal?
Estudios científicos de los últimos 50 años han demostrado un patrón claro: Entre más sal consumimos, más alta es nuestra presión sanguínea.
En un estudio del 2021 de 85 ensayos clínicos, los científicos observaron qué sucedió con la presión sanguínea de las personas cuando consumían de 400 a 7 mil 600 miligramos de sodio al día.
A medida que aumentó su consumo, también lo hizo la presión sanguínea. El efecto fue más fuerte en las personas que ya eran hipertensas, aunque los investigadores también lo detectaron en personas que no la padecían.
Controlar la presión sanguínea es una de las cosas más importantes para reducir el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón o sufrir una apoplejía.
El consumo excesivo de sal provoca casi dos millones de muertes al año, principalmente de enfermedades cardiovasculares.
¿Cuánta sal es demasiada?
De acuerdo a los lineamientos dietéticos de Estados Unidos, los adultos deben consumir no más de 2 mil 300 miligramos — el equivalente a una cucharada de sal de mesa — por día.
La Organización Mundial de la Salud y la Sociedad Internacional de Hipertensión han disminuido el límite a no más de 2 mil miligramos al día.
La Asociación Americana del Corazón señala que aunque no más de 2 mil 300 miligramos al día es un buen objetivo, es mejor evitar superar los 1 mil 500 miligramos al día, especialmente si se padece hipertensión.
Aunque no todos los expertos están de acuerdo con eso.
En varios estudios publicados en la última década, los investigadores reportaron que sólo las personas que consumían más sodio — en el orden de los 5 mil miligramos al día — son las que tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades del corazón o una muerte temprana.
Esos hallazgos sugieren que los lineamientos sobre el sodio establecido por organizaciones de salud en todo el mundo son demasiado estrictos, comentó el Dr. Martin O´donnell, profesor de Medicina Neurovascular de la Universidad de Galway en Irlanda.
Esta perspectiva ha acaparado mucha atención, aunque otros investigadores encontraron serias fallas en estudios contradictorios, el principal problemas es que no se puede medir con exactitud cuánta sal consumen las personas.
En un análisis del 2022, se compilaron resultados de estudios que utilizaron métodos más rigurosos.
Entre los 10 mil 700 adultos que fueron estudiados durante casi nueve años, la mayoría consumió entre 2 mil 250 y 5 mil 250 miligramos al día.
Los investigadores encontraron que los que consumieron menos sal tuvieron un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares.
A medida que se incrementa el consumo de sal, también lo hace el riesgo cardiovascular, un hallazgo que apoya los lineamientos de Estados Unidos.
¿CÓMO DETECTAR SI ESTOY CONSUMIENDO LA CANTIDAD CORRECTA?
En Estados Unidos, aproximadamente el 70 por ciento del sodio que consumen las personas proviene de alimentos procesados y de comer fuera de casa, de acuerdo a la Administración de Alimentos y Medicamentos.
La mejor manera de reducir el consumo de sal es comer menos de esos alimentos y cocinar la comida en casa. Los vegetales, frutas, frijoles, nueces y productos lácteos son ricas fuentes de potasio, comer más de esos alimentos puede incrementar el potasio y también se debe reducir el consumo de sal.
Puede experimentar condimentando los alimentos con hierbas aromáticas y especies y menos sal. Investigaciones sugieren que los sazonadores picantes como el chile y ácidos como el jugo de limón y vinagre destacan el sabor de la sal.