Viene reversa a militarización / GN, civil o dictadura / Se nos casa Maru / El 1%; en la mañanera
LUIS González Alcántara, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), propondrá declarar inconstitucional la transferencia operativa, presupuestaria y administrativa de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
El proyecto ya integrado da cuenta que la reforma publicada el nueve de septiembre de 2022 es contraria a la Constitución, que establece que la Guardia Nacional, forma parte del ramo de la seguridad pública civil y no de la milicia.
“Resulta inconstitucional el traslado administrativo, presupuestario, orgánico, funcional y de mando que el Decreto impugnado, a través de los artículos analizados en este apartado, realiza.
“Éste se opone al texto del Artículo 21 que, como una garantía del carácter civil de la Guardia Nacional, incorpora expresamente que ésta deberá quedar incorporada a la Dependencia del ramo de la Seguridad Pública, quien formulará, no solamente la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, sino que sus programas, políticas y acciones”.
Se supone que el proyecto estará en el pleno de la SCJN, para ser votado antes de que concluya este mes.
De aprobarse significaría un revés a la militarización que está en curso del país desde la CuartaT bajo los designios y estrategia del propio presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador.
Para que el proyecto en donde el ministro González Alcántara argumenta que existe anticonstitucionalidad en la adhesión de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional, necesita alcanzar nueve votos de los 11 disponibles en la Suprema Corte.
De estrada, es de suponerse que la ministra Yasmín Esquivel proclive a la CuartaT, lo votará en contra, por lo que González Alcántara requiere una de una votación casi unánime del resto 10 ministros de los integrantes de la SCJN.
Argumentos existen suficientes para regresar la calidad de civiles a los elementos de la Guardia Nacional, habrá que espera sólo unos días para conocer si se registra presión desde las mañaneras de López Obrador sobre los ministros, como ha venido ocurriendo en los recientes cuatro años y de manera muy remarcada Esquivel no pudo alcanzar la presidencia de la SCJN por haber plagiado su tesis profesional.
LA GOBERNADORA del estado, María Eugenia Campos Galván está en plena planeación de su boda, la que se supone se realizaría en este mismo año.
Dicho por su círculo cercano, incluso ya habría recibido el anillo de compromiso, en una reunión familiar muy en corto y sólo con acceso para algunos amigos (as) de la mandataria.
Si el destino no dice otra cosa, la gobernadora contraería nupcias con el empresario de la industria automotriz Víctor Manuel Cruz Russek, con quien por cierto realizó recientemente un viaje a Santa Fé, Nuevo México… De ahí pues no pues no alcanza el satélite espía.
Maru asume esa importante decisión y está el su derecho, es una mujer libre; los dimes y diretes vendrán luego, siempre y cuando este en función pública; la vida privada corresponde a cada ente desde el periodismo serio.
UNA INVESTIGACIÓN acreditable SPIN Taller de Comunicación Política, reveló muy interesantes sobre la audiencia de La Mañanera del presidente Manuel López Obrador.
Los número del la investigación de docentes investigadores, arrojan en resumen que en el último año la transmisión del “programa” presidencial en los dos últimos años ha estado en la baja y en este año en picada, en el lo que se refiere a la audiencia.
La Mañanera ha perdido seguidores, por los dichos inexactos del presidente, es decir, por sus otros, datos, los ataques a quienes no son cofrades de sus pensamientos y la división de los mexicanos que cada día genera, ese dicen los investigadores de SPIN.
En números analizados, en redes sociales, el espectro más grande que tiene el presidente son que tiene 10 millones de seguidores, de los cuales sólo el uno por ciento lo sigue en las mañaneras.
Dato duro y ahí está, mañana o pasado dirá que son conservadores o casas de esas con relación a los “despreciables”, investigadores, es mas va a decir que tiene otros datos.
El tema viene a la palestra pública, cuando voces en la democracia pide que ya pide que desparezca el reallity show que a los mexicanos nos cuesta, 10 mil millones de pesos al año, más de lo que gastó Peña Nieto y su superreferente Calderón, en sus tiempos.