*Mienten, fueron unas cuantas, no todas
*Que Eugenio pide 200 mdp por el centro
*Ausencia de morena en crisis migrante
*H. Villasana nuevo abogado de Duarte
*Extraña manifestación pro-militar
La narrativa de las mujeres violentas y quienes las justifican es que “fuimos todas” o “fueron todas”, estribillo que repiten como los monjes tibetanos sus mantras. No señores ni señoritas, las que atentaron contra los edificios públicos fueron unas cuantas, una minúscula minoría con la consigna del complot avieso.
En esas marchas participan miles, pongamos el número de 20 mil, y no llegan a doscientas las violentas empeñadas romper o incendiar puertas y ventanas de Palacio, queriendo ingresar por la fuerza para causar más destrozos adentro. Me atrevo a decir que el 95 por ciento o más de las mujeres llegan y se van sin quebrar un solo cristal ni atacar los edificios públicos.
Eso de que “fuimos todas” o el “fueron todas” de su vocería es un ardid discursivo para justificar su violencia extrema en la impunidad de género; ellas tienen derecho a cualquier destrozo pero que no las toquen ni las volteen a ver por que las ofenden o provocan. ¿Porqué?.
Esos grupos minúsculos actúan con la experiencia adquirida en décadas de lucha clandestina de izquierda. Lo que vimos el 8M es una copia fiel del asalto a Palacio cuando Duarte protestó el cargo, atribuido entonces a Jaime García Chávez. Actúan bajo un manual de operación que empieza por decirse provocadas y luego perseguidas. Demasiado obvio, cuando soltaron los gases ya habían destrozado la puerta principal.
Frente a una situación de claro comploto contra el gobierno actual, es necesario que el 95 por ciento de mujeres que no se ven representadas en la violencia, marquen distancia y las dejen solas ¿harían lo mismo si únicamente llegasen a Palacio las complotistas?. Claro que no, se escudan en las miles que marchan sin más consigna que la exigencia de parar los abusos históricos.
El Palacio de gobierno no es de Maru Campos como no fue de Corral ni de ningún otro gobernador, y como tampoco será si mañana ocupa el cargo uno del partido oficial. Es de todos los chihuahuenses, forma parte de nuestra historia, es uno de los símbolos de nuestra identidad, atentar contra él es atentar contra el ser chihuahuense.
Rompeolas
Que Eugenio Baeza exige 200 millones de pesos para levantar el secuestro del Centro de la Ciudad. ¿Y cuanto le metió de su bolsa? Quienes lo conocen aseguran que ni un centavo, está acostumbrado a hacer negocios con dinero ajeno, jamás propio. Como decía Adriana Fuentes de los empresarios juaritos: “A Juárez todos le quieren sacar y nadie quiere meterle”. Así Eugenio en Chihuahua, hizo un mal negocio y de todos modos exige dividendos. Tiene que entregar el Fideicomiso, ese secuestro ya duró mucho, el Centro es de todos los chihuahuenses, no sólo de él.
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Silencio absoluto de diputados y dirigentes partidistas de Morena en la crisis humanitaria que vive ciudad Juárez, enclave de su fuerza electoral, por los migrantes. Es un son que no quieren escuchar porque saben que el origen del problema está en la sumisión abyecta del presidente López Obrador hacia el Imperio, al aceptar acuerdos que jamás concedieron presidentes anteriores. Cruz Pérez Cuéllar debe tragarse el sapo solito y para empezar no tuvo más remedio que salir a medios diciendo que los migrantes deben cumplir reglamentos, pero no hizo el menor reclamo a la Federación. La Crisis seguirá creciendo y Morena no moverá ni un dedo para evitarla, “es un asunto de gobiernos estatales y municipales”, sentencio el otro López, Adán Augusto. Así resuelven sus tiraderos.
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En la mesa del Mirador reportaron que, desesperado por que nada le sale bien, César Duarte decidió cambiar de abogado y contrató a Héctor Villasana, hijo del fallecido poeta del amparo. Confían en que el dos de abril, día de otra audiencia intermedia, le sea concedida la prisión domiciliaria. ¿Será? Podría, hace tiempo que Duarte no es de interés más que para su némesis, Javier Corral, así que el asunto es estrictamente judicial. El ex ya no es noticia, pero veremos que dice el juez que conoce su causa, igual siguen dando largas a ésta medida cautelar pues se trata de una audiencia intermedia y bien podría esperar la definitiva para resolver. Pero el hombre tiene esperanza, tres años en la sombra aflojan la voluntad de cualquiera.
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Extraña la marcha ciudadana en pro de los militares juzgados “por cumplir su deber”, unos quinientos manifestantes vestidos de verde olivo, entre los que iban –trascendió- mandos retirados. La disciplina del Ejército Mexicano es ejemplar y suele llegar hasta a sus miembros en retiro ¿señales de inconformidad con la política de abrazos y no balazos del Presidente que los envía a combatir el crimen con ordenes de no usar las armas? Híjole, este tema debe ser analizado por especialistas.