*Maestro —intervino Juan—, vimos a un hombre que expulsaba demonios en tu nombre; pero, como no anda con nosotros, tratamos de impedírselo.
No se lo impidan —les replicó Jesús—, porque el que no está contra ustedes está a favor de ustedes. Lucas 9:49-50.
Ojinaga Chih.- En la fe cristiana, Satanás es principalmente un acusador y adversario; una entidad decididamente malévola que posee cualidades malignas. Ayer el pastor Agustín Morales del Centro Evangélico fue enfático en su mensaje al lanzar la pregunta ¿Amigos o enemigos de Dios?
¿Qué significa ser amigo del mundo y enemigo de Dios?
¿Qué es la “amistad con el mundo”? La amistad con el mundo significa seguir, vivir, amar y estar de acuerdo con los deseos de la carne y el espíritu que los impulsa, esto es, ¡yo, yo, yo! ¡No puedes vivir de esta manera y ser amigo de Dios!
Abraham fue llamado amigo de Dios, Abraham era un hombre que tenía una íntima relación con Dios y hasta fue llamado Su amigo, es decir, Él le confiaba Sus secretos y, a la vez, daba dirección a su vida. Cuando Dios lo llamó, le dijo: “Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré” (Génesis 12:1b).