El día 26 de Noviembre de 1810, el Ejército Insurgente al mando de Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla Gallaga Mandarte y Villaseñor, toman la ciudad de Guadalajara y establece ahí un cuartel general; ya desde el 16 de Septiembre, después del Grito de Independencia, Hidalgo se había proclamado y autonombrado como “Generalísimo Capitán General y Protector de la Nación”.
Al establecer el Gobierno Insurgente, Hidalgo se basó en diversos Bandos y Manifiestos, dichos documentos que había proclamado entre Septiembre y Noviembre de 1810, son la base del proyecto de gobierno y conforman la constitución de una nueva nación bajo el liderazgo del cura Hidalgo; para ello, el liderazgo y el pensamiento de Hidalgo se vió reflejado en la creación de dos instituciones al interior del movimiento insurgente: “La Suprema Junta Nacional Americana” o “Congreso Nacional Americano Gubernativo” , que popularmente se conoció como “La Junta de Zitácuaro” , la otra institución creada fue “El Congreso de Anáhuac”, que declaraba la Independencia de la América Septentrional y el Decreto de la Constitución de Apatzingán.
El 1 de Diciembre de 1810 en Guadalajara, Miguel Hidalgo comienza con la organización de lo que él considera su gobierno y el nuevo gobierno insurgente; creando Ministerios y nombrando a los respectivos Ministros: José María Chico como Ministro de Gracia y Justicia además de Presidente de la Audiencia de Guadalajara; Ignacio López Rayón como Secretario de la Presidencia; General Ignacio Allende como Capitán General de América; José Ignacio Ortíz de Zaldívar como Oídor Subdecano; Pedro Alcántara de Avendaño; Oídor de la Audiencia Nacional; Francisco Solórzano como Oídor General e Ignacio Meitas como Fiscal de la Audiencia Nacional; este fue digamos el primer gabinete del gobierno insurgente de Hidalgo, establecido en Guadalajara.
Curiosamente, mientras Hidalgo establecía el Gobierno Insurgente en Guadalajara, la sede del Movimiento Insurgente armado se mantenía en Ecuandureo y Apatzingán, Michoacán bajo el mando de José María Morelos y Pavón, segundo al mando y persona de absoluta confianza de Miguel Hidalgo y quien desde la Tierra Caliente de Michoacán mantenía y dirigía las operaciones militares contra el Virreinato y el Ejército Realista.
Como había mencionado, entre los meses de Septiembre a Diciembre de 1810, Hidalgo emitió cinco Documentos o Bandos o Manifiestos, que le daban una idea y forma a sus pretensiones de gobierno insurgente; el primer Documento emitido el 28 de Septiembre de 1810 desde su campamento en la Hacienda de las Burras, cerca de Celaya, Guanajuato, iba dirigido al Intendente de Guanajuato, Juan Antonio Riaño; en dicho Documento Hidalgo le informa que por “mandato popular” de su ejército de cincuenta mil hombres ha sido elegido como “Generalísimo” , “Capitán General de América” y “Capitán General y Protector de la Nación”, así mismo le solicita al Intendente Riaño que le comunique a sus superiores (General Félix María Calleja, Virrey Francisco Javier de Venegas y el Rey Fernando VII) del movimiento insurgente, de su mando, así como de sus altos cargos y de que entregue inmediatamente la Plaza de Guanajuato y la renuncia inmediata de todo el gobierno español, so pena de tomar las medidas y acciones necesarias que le han sido conferidas, así como la amenaza de atacar la Alhóndiga de Granaditas en caso de rehusarse; así como ser destruidos con la aplicación de toda su fuerza.
El Intendente Riaño le responde que por ningún motivo ni en ninguna circunstancia le entrega la plaza, además que, si tiene algo que informar, solicitar o reclamar a la Corona Española lo haga ante las instancias indicadas y por último le responde que el General Calleja ya está enterado de su alzamiento y viene en su busca.
El segundo Documento, al que Hidalgo lo titula como su Primer Bando, emitido, fechado y publicado el 19 de Octubre de 1810 en Valladolid (Morelia), firmado por Don José María Ansorena, y en cuyo texto el Excelentísimo Señor Capitán General de América, Doctor Don Miguel Hidalgo y Costilla ordena abolir y suprimir la esclavitud y la castas en el territorio de la Tierra Caliente de Michoacán; ordenando a los dueños y hacendados que los tuvieren, la inmediata liberación de todos los esclavos; de no hacerlo sufrirán la pena de muerte y la confiscación de todos sus bienes; también Hidalgo ordenaba que a los “miserables” (término con el que en esa época se designaba a los más pobres) no se les cobrara ningún tipo de impuesto ni contribución; también sentencia la horca para los saqueadores. Además, en dicho Bando se señala que se le debe de estar agradecido al Excelentísimo……… Hidalgo por todos estos beneficios. Por supuesto, los detractores de Hidalgo aprovechaban estas ínfulas de grandeza para peguntarse si era libertador o tirano.
En el Tercer Documento, emitido, publicado y firmado el 31 de Octubre de 1810 por José María Morelos en el Cuartel General de la Hacienda El Aguacatillo, Ecuandureo, Michoacán, en él se establece el “Plan del Gobierno Americano” de orden superior para conocimiento de todos los comandantes de las divisiones y plazas conquistadas. En este Documento se establecen 29 artículos que deberán ser seguidos a manera de ordenanzas públicas, por ejemplo establece que si un “gachupín” (español), le debe a un criollo, mestizo o mexicano indio, deberá pagar la totalidad de la deuda con todo rigor (art. 10); en cambio si un mestizo o un mexicano indio le debía a un gachupín, la deuda se declaraba nula (art. 9); se retiran del gobierno a todos los españoles (art. 2); en cuanto a religión nada se toca, porque todos debemos de seguir lo que profesamos, es decir católica (art. 11); los ascensos militares serán por méritos y no por amistad, parentesco ni por simple designio (art. 29), y así por el estilo se organizaba la convivencia social en este gobierno.
El cuarto Documento emitido, fechado y publicado el 29 de Noviembre de 1810 en Guadalajara, Nueva Galicia, es el Acta de Abolición de la Esclavitud, pero ya firmado, corregido y extendido por Miguel Hidalgo, en donde se aplica a toda la América Septentrional, no solamente a la región del Bajío y Michoacán.
El quinto documento es el Manifiesto para la creación del Congreso Nacional, emitido, fechado, firmado y publicado por Miguel Hidalgo el 15 de Diciembre de 1810 en Guadalajara. En este Documento, Hidalgo primero se erige como “generalísimo de las armas americanas, electo por la mayor parte de los pueblos del reino para defender a sus ciudadanos y sus derechos” ; en una segunda etapa del Manifiesto, Hidalgo , que ya tenía muchos detractores, aprovecha para victimizarse y jurar su amor por la Patria y por el pueblo que lo eligió y acusar de injurias y mentiras de sus detractores, declarándose totalmente católico, para en la tercera parte del manifiesto, pedir la unión y la creación de un Congreso Nacional en el que deberán estar representados todos los ciudadanos y todas las regiones; también aprovecha para convocar a rechazar a los enemigos del País, que en esa época no eran otros más que Francia, España y los ciudadanos de esos países; incluso acusa a Napoleón Bonaparte (que había invadido España y hecho prisionero al Rey Fernando VII) y a su Hermano José Bonaparte (quien había tomado el control del gobierno español) y a quien Hidalgo llamó “Pepe Botellas”, debido a su afición por el alcohol, acusándolos de tratar de destruir la religión católica y el cristianismo; todo ello tratando de lograr la unidad de los mexicanos en torno a su figura y liderazgo.
Así se conformó el Gobierno Insurgente de Miguel Hidalgo, quien unos meses después, ante el asedio y persecución del Ejército Realista, es hecho prisionero junto con sus principales cabecillas en “Las Norias de Baján” en Coahuila por el Capitán Ignacio Elizondo, quien bajo las órdenes del implacable General Félix María Calleja, lo trasladó a Chihuahua, donde por órdenes de Calleja se les juzgó, sentenció y fueron fusilados en 1811.
Que tengan un buen día
José Luis Jaramillo Vela
Fuentes Bibliográficas:
*inehrm.gob.mx
*memoriapolitticademexico.org
*constitucion1917.gob.mx
*relatosehistorias.mx
*Wikipedia