Estados Unidos.- “Espero que se haya divertido rodándola”, contestó Liza Minnelli en el último número de ‘Variety’ cuando le preguntaron qué opinaba sobre la posibilidad, ya una realidad, de que Renée Zellweger se llevara el Oscar por interpretar a su madre, Judy Garland, en ‘Judy’. También aclaró que no había visto la película ni pensaba hacerlo. O sea, no ha cambiado de opinión respecto a lo que escribió en Facebook al enterarse de que iban a rodar la cinta: “No apruebo ni condeno el film”. Más seca se mostró con Zellweger: “Ni la conozco ni he hablado con ella”.
Y no se trata de envidia, ya que Liza tiene también un Oscar, ganado en 1972 por ‘Cabaret’, además de un Emmy, un Grammy y un Tony, lo que la convierte en una de las pocas que ha conseguido los cuatro premios más importantes de la industria del entretenimiento.
Rupert Goold, director de Judy, contó a Entertainment Tonight porque creía que a Liza no le había hecho ninguna gracia el proyecto: “En algún sentido, es una invasión de la privacidad”.
Está, además, el hecho de que el personaje de Minnelli aparece en Judy, interpretado por Gemma-Leah Devereux, y la compleja relación que ella siempre tuvo con su madre. “Estaba absolutamente concentrada en no hacer lo que ella hizo”, ha contado.
Aunque algunos errores de su madre sí los ha repetido. Empezando por las adicciones. Garland murió a los 47 años por una sobredosis de barbitúricos después de toda una vida marcada por el alcohol y las pastillas. Minnelli no se queda atrás: ha pasado múltiples veces por clínicas de desintoxicación, ha hablado del origen genético de su alcoholismo y Andy Warhol contó cómo en la salvaje juventud de ella, una noche entró en una fiesta diciéndole al anfitrión: “Dame todas las drogas que tengas”.
La madre se casó cinco veces y la hija, de momento, cuatro. Varios maridos de ambas resultaron homosexuales, como Vincent Minnelli y Mark Herron, por parte de Garland. O Peter Allen y David Gest, primer y último marido de Liza. Incluso cuentan que Herron y Allen estuvieron liados. El último divorcio de Minnelli, por cierto, fue tremendo: Gest la acusó de pegarle cuando estaba borracha.
DENUNCIADA POR ACOSO
Más similitudes: sus problemas de salud y lo poco que acertaron los médicos, afortunadamente. En 1959, a Garland le dieron cinco años de vida, como mucho. Ella logró que se convirtieran en diez. A Minnelli, tras sufrir una encefalitis, le dijeron que nunca se levantaría de la silla de ruedas y logró recuperarse.
Judy, en cambio, nunca fue acusada de acoso sexual. Liza Minnelli sí tuvo que pasar por ese trago en 2004, cuando su chófer durante diez años, Mohamed Sumayah, la denunció por pegarle y por obligarle a mantener relaciones sexuales con ella. Pedía 100 millones de dólares y el caso se resolvió cinco años después mediante un acuerdo privado entre las partes del que nunca se conocieron los detalles.